Desde el 2014, la confianza en las instituciones del Estado ha caído de manera progresiva. A criterio del analista Santiago Basabe, responde a un problema estructural del país, que vincula lo político y económico con lo social, que «da cuenta de una sociedad que se está descomponiendo peligrosamente, ya que está adquiriendo valores que no debería».
Culpa, en parte, a los actores políticos. Y es que, dice, Ecuador ha caminado en un proceso evolutivo hacia la desinstitucionalización, debido a que la corrupción se ha incrementado vertiginosamente. «La relación de la política con la corrupción y con el crimen organizado se ha desencadenado».
El politólogo destacó la necesidad de establecer leyes que sean cumplibles, para que la gente pueda crear en la norma, en el resultado del Estado respecto al irrespeto de la norma y así recuperar la confianza en la institucionalidad.
Finalmente, hizo un llamado a la ciudadanía y a los actores políticos para que trabajen juntos en la búsqueda de soluciones. Subrayó la importancia de la participación activa de la sociedad civil y la necesidad de una reforma en las instituciones políticas para abordar los problemas estructurales.
