El excomandante general de la Policía, Fausto Salinas, se pronunció sobre las acusaciones de presuntas irregularidades en las cifras de homicidios y muertes violentas durante el gobierno de Rafael Correa (2007-2018).

Aclaró que, aunque la institución policial como tal no estuvo implicada en la manipulación de datos, es posible que algunos malos elementos sí lo hicieran bajo la presión del gobierno.

Reconoció que, durante ese periodo, hubo tanto acciones positivas como negativas y destacó la importancia de evaluar el trabajo hecho: “Lo que se ha hecho bien hay que potenciarlo. Y lo que se ha hecho mal hay que combatirlo y judicializarlo”.

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Las declaraciones surgieron en el contexto de la auditoría ordenada por el presidente Daniel Noboa al Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), tras la investigación del criminólogo Arduino Tomasi sobre las cifras de muertes violentas, desapariciones y tráfico de menores en la era correísta.

El excomandante también abordó la denuncia de Andersson Boscán sobre una presunta persecución policial durante el gobierno de Guillermo Lasso. Salinas negó que Lasso haya interferido en acciones de inteligencia, destacando que el exmandatario fue respetuoso de los procesos internos de la Policía. Salinas subrayó que la Policía solo actuó conforme a órdenes y principios, especialmente en operativos contra organizaciones criminales.