La fijación de los precios de los combustibles, en teoría, está vinculada al precio internacional del petróleo (WTI, West Texas Intermediate), pero en la realidad, los valores que se muestran en las estaciones de servicio indican lo contrario. ¿Quién puede entenderlo?
Ivo Rosero, presidente de la Cámara de Distribuidores de Derivados de Combustibles, en diálogo con Freddy Paredes de Ecuadorenvivo.com, tampoco entiende cómo Petroecuador determina los precios de los combustibles.
Para el dirigente gremial, la fórmula de cálculo no tiene sentido. Aunque los precios de las tres gasolinas deberían variar con el WTI, en el último mes, la gasolina Súper bajó 31 centavos de dólar por galón, mientras que las gasolinas de 85 octanos subieron 11 centavos.
“Es un absurdo que el WTI suba y los precios de las gasolinas Extra/Eco País también, mientras que la Súper baje. Son fórmulas que maneja Petroecuador; nadie las entiende, solo ellos. Creemos que no hay un criterio técnico en la fijación de los precios de los combustibles”.
“Y esto no es solo de este mes; en meses anteriores tampoco hubo correspondencia entre el WTI y la variación porcentual entre las gasolinas de 85 octanos y la Súper (95 octanos)”, añadió.
Rosero recordó que el precio de la Súper está liberado y lo determina el mercado.
En cambio, las gasolinas de 85 octanos están sujetas a un mecanismo de bandas de precios desde el 26 de junio. En esa fecha, el subsidio para la Extra era de 28 centavos, mientras que para el Eco País era de 42 centavos por galón. Sin embargo, en septiembre se redujo en 18 centavos, perdiéndose lo que se había incrementado.
“Las gasolinas de 85 octanos no están liberalizadas ni alcanzan los niveles internacionales”, agregó.
Rosero mencionó que las estaciones de servicio tienen congelado su margen de ganancia desde hace 21 años: en el caso de la Extra, el margen es de 16 centavos por galón, compartido entre las comercializadoras y los transportistas.
En Colombia, el margen es de entre 33 y 35 centavos por galón, y en Perú es de 28 centavos. Con el agravante, dijo, de que en Ecuador el salario básico es de 460 dólares, en Colombia de 300 dólares y en Perú de 260 dólares. “Aquí es la mitad de los ingresos, pero el doble de los gastos”.
El dirigente señaló, con base en un estudio del Banco Mundial, que el sector requiere un margen adicional de 6 centavos para operar sin pérdidas. Además, están obligados a vender al mismo precio en cualquier región del país, sin considerar los costos de transporte, cosa que no ocurre, por ejemplo, en Colombia, donde existen precios diferenciados.
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