El economista Alberto Acosta Burneo abordó la situación económica actual de Estados Unidos y su posible impacto en Ecuador. A pesar de los recientes nerviosismos en los mercados debido a datos de empleo decepcionantes, aclaró que la economía norteamericana no está en recesión en este momento, pero sí está experimentando una desaceleración.

Explicó que esta desaceleración es parte del ciclo económico que comenzó con la agresiva emisión de dinero por parte del Banco Central de Estados Unidos a partir de 2020. Esta expansión monetaria provocó una inflación significativa, lo que llevó a la Reserva Federal a elevar las tasas de interés para controlar la inflación. Ahora, con el retiro del exceso de liquidez, la economía está ajustándose, lo que podría llevar eventualmente a una recesión.

El desplome reciente de la bolsa de Nueva York fue una corrección en los precios, una respuesta a la retirada de liquidez y la caída de la demanda de bienes. Acosta Burneo advirtió que podrían haber más correcciones en el futuro, dependiendo de cómo evolucione la economía estadounidense y la efectividad de sus políticas para combatir la inflación.

Alberto Dahik alerta sobre riesgos ante crecimiento de cooperativas en Ecuador

Respecto a las implicaciones para Ecuador, Acosta Burneo identificó tanto efectos negativos como positivos. En el lado negativo, una desaceleración en Estados Unidos puede debilitar los precios de las materias primas, particularmente el petróleo, y reducir las remesas enviadas por los emigrantes ecuatorianos. Sin embargo, una posible reducción en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal podría abaratar el financiamiento para Ecuador y debilitar el dólar, lo cual beneficiaría la competitividad del país.

El riesgo país de Ecuador ha aumentado recientemente, en parte debido a la disminución de los precios del petróleo. A pesar de esto, considera que la posibilidad de un default es exagerada, argumentando que la normalización de la política monetaria estadounidense y una posible reducción en las tasas de interés podrían aliviar el pago de intereses y facilitar el acceso a financiamiento.

Sobre la inflación en Ecuador, señaló que, aunque la tasa de julio fue la segunda más alta del año, la tendencia a largo plazo es una desaceleración, ya que la inflación del país es consistentemente inferior a la de Estados Unidos. Sin embargo, choques puntuales, como el incremento de los precios de los combustibles, pueden influir temporalmente en la inflación.