Luis Altamirano, excomandante general del Ejército, habló sobre el trágico asesinato de una subteniente del Ejército en un fuerte militar, quien también se presume fue violada.

Describió la estructura de control existente en los fuertes militares, señalando la presencia de diversos oficiales responsables del control y la vigilancia diaria. “Hay un comandante de fuerte, un jefe de control, un oficial de guardia, un jefe de cuartel, y un oficial de semana, además del personal de tropa en funciones de control y guardia”, explicó Altamirano, sugiriendo que, en teoría, estas capas de control deberían prevenir incidentes como el sucedido.

Altamirano destacó la importancia de los principios y valores en las Fuerzas Armadas, y cómo estos deben aterrizarse a través de normas y protocolos. “No deberían desarrollarse fiestas con consumo de bebidas alcohólicas hasta llegar a la inconsciencia”, afirmó, subrayando que el hecho de que una fiesta así ocurriera en un fuerte militar es una grave violación de las normativas internas.

Brigada de Selva Napo no cuenta con cámaras que permitan evidenciar lo que pasó con la subteniente Ati

El excomandante señaló la deficiencia en las acciones preventivas y la necesidad de capacitación permanente en temas como Derechos Humanos, manejo de relaciones de género y protocolos ante emergencias. “Requiere una capacitación permanente, no solo en el tema de manejo de Derechos Humanos, sino en tema de manejo de las relaciones de género y de lo que son accidentes”, comentó, enfatizando que estas capacitaciones son cruciales para evitar situaciones similares en el futuro.

Respecto a las investigaciones en curso, Altamirano aclaró que es esencial esperar los resultados antes de emitir juicios. “No podemos adelantar a determinar quiénes son los responsables, debemos esperar el proceso de investigación”, mencionó. También destacó la importancia de la autopsia y los análisis forenses para determinar las circunstancias exactas de la muerte.

Altamirano criticó la respuesta inicial de las autoridades militares, señalando que no debieron emitir juicios prematuros sobre la causa de la muerte. “No es potestad de la autoridad militar determinar la causa de un suceso; eso le corresponde a las autoridades pertinentes, como medicina legal y ciencias forenses”, afirmó.

El excomandante sugirió que hubo un fallo significativo en el acompañamiento y cuidado de la subteniente. “Lo correcto hubiese sido que el personal femenino militar pueda ingresar a la habitación o lo ingresen en compañía de personal femenino militar”, declaró, señalando que el protocolo exige la presencia de personal femenino en tales situaciones.