El presidente Daniel Noboa, vetó totalmente las reformas al Código de la Función Judicial, cuya reforma más polémica permitía que los vocales del Consejo de la Judicatura que fueron enjuiciados y que estén en prisión preventiva, puedan acceder al beneficio de «licencia temporal».
El texto aprobado en segundo debate apenas dos días antes en la Comisión de Justicia, presidida por el correísta Fernando Cedeño, no tuvo el voto del bloque oficialista de ADN. La polémica propuesta normativa modifica 25 artículos y es el resultado del análisis de cuatro iniciativas distintas.
«En caso de que la ausencia temporal se deba al cumplimiento de prisión preventiva o arresto domiciliario dispuestos por jueza o juez competente, la o el vocal podrá solicitar acogerse al régimen de licencia sin sueldo por el tiempo máximo establecido en este Código», decía el texto. Mientras dure la prisión preventiva o el arresto domiciliario del vocal, el Pleno de la Judicatura suspenderá todas las funciones que lo asisten como miembro del organismo, con excepción del fuero.
Con la decisión del Ejecutivo estas pretendidas reformas quedarán ‘congeladas’ durante un año, en el que el paramento no podrá volver a tratarlas según dispone la norma.
Un año después, los legisladores podrían volver a decidir el futuro de la normativa en un nuevo debate. Vocales de la Judicatura con prisión preventiva pueden pedir licencia, dice la Asamblea Entre los varios cambios aprobados el 21 de mayo, con 92 votos, los legisladores incluyeron uno específico para los vocales del Consejo de la Judicatura (CJ) en el artículo sobre la integración del organismo.
