El alcalde Pabel Muñoz, la prefecta de Pichincha Paola Pabón y más invitados asistieron a la ceremonia solemne de renovación de la Consagración del Ecuador al Corazón de Jesús oficiada por monseñor Alfredo José Espinoza, arzobispo de Quito y Primado del Ecuador, la noche de este lunes santo, en la Basílica del Voto Nacional.
El 25 de marzo de 1874, el Ecuador fue el primer país del mundo en consagrarse al Sagrado Corazón de Jesús, por iniciativa del expresidente Gabriel García Moreno y el clero. Al cumplirse 150 años de este acto histórico de fe, el Papa Francisco escogió al país como sede del 53° Congreso Eucarístico Internacional (IEC2024).
Al inicio de la ceremonia se oró por los gobernantes para que escuchen el clamor de los pobres y busquen mejores días para todos.
En su homilía, Alfredo José Espinoza dijo que ante la situación de violencia que vive el país pone “su corazón en el Corazón de Jesús para amar, para servir, para abrir sus brazos, para mirar la realidad y, para crear fraternidad (…) ha llegado el tiempo de volver a renovar nuestra consagración, de volver a decir de una vez para siempre ¡Todo es tuyo, salva al Ecuador!”.
La misa fue concelebrada por los obispos auxiliares de la Arquidiócesis de Quito y alrededor de 150 sacerdotes, con la participación de fieles católicos, religiosas, religiosos y agentes de pastoral.
