El alcalde de Durán, Luis Chonillo, ha lanzado un llamado desesperado al Gobierno de Daniel Noboa para mantener la presencia policial y militar en el cantón, especialmente tras los recientes atentados ocurridos el lunes 27 de mayo.
“Pido ayuda, no puedo estar solo, ni abandonado. Nada va a mejorar si nos dejan solos”, destacó Chonillo.
Durán, una ciudad costera ecuatoriana, se ha convertido en una de las más violentas del país y del mundo. Chonillo instó al gobierno a no limitar la intervención de la fuerza pública solo a momentos de crisis, sino a mantener una presencia constante para asegurar la paz y estabilidad.
“El año pasado llegamos a ser la ciudad más violenta del mundo, registrando 145 muertes por cada 100 mil habitantes. Ni México ha llegado a eso”, señaló Chonillo.
Además, enfatizó que las muertes violentas en el cantón han aumentado en un 300%, junto con un incremento de atentados y ataques armados.
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A pesar de esta situación crítica, la fuerza pública no está presente en las calles de Durán, lo que ha tenido un impacto negativo en el sector productivo. Muchos locales comerciales se ven obligados a cerrar a las 17:00 debido al miedo generalizado entre los habitantes.
Chonillo subrayó la necesidad de un plan de seguridad integral por parte del Gobierno, que debería comenzar en cantones con altos índices de violencia como Durán, Quevedo, Babahoyo, Manta, Machala y Esmeraldas. Este plan no solo debería mostrar mano dura, sino también proporcionar recursos para recuperar el tejido social. “El año pasado veníamos pidiendo la asignación de recursos a tiempo, debe ser priorizado”, puntualizó.
Para transformar y recuperar Durán, Chonillo destacó la importancia de invertir en infraestructura y obra civil, así como en trabajar con las familias para dinamizar la economía. “La seguridad está correlacionada con absolutamente todo”, afirmó el alcalde, subrayando la necesidad de un enfoque holístico para resolver los problemas de violencia y mejorar la calidad de vida en Durán.
