En un anuncio realizado el pasado 14 de febrero, la Agencia de Regulación y Control de Energía y Recursos Naturales no Renovables (ARCERNNR) reveló que la producción petrolera del Ecuador alcanzó los 485,165 barriles diarios. De este total, 396,909 barriles provienen de Petroecuador, mientras que las empresas privadas a cargo de campos contribuyen con 88,255 barriles. Estas cifras, no exentas de controversia, generan incertidumbre sobre su confiabilidad técnica.
La ministra de Energía, Andrea Arrobo, desató la polémica al afirmar que al asumir su cargo en el nuevo Gobierno, se encontraron con «números completamente maquillados» en las cifras de producción petrolera. Arrobo aseguró que están corrigiendo estos informes, pero la gerenta de Petroecuador, Marcela Reinoso, realiza verificaciones en campo para garantizar la integridad de los datos que llegan al ministerio.
Trabajadores y el exgerente de Petroecuador, Reinaldo Armijos, adoptan una postura cautelosa frente a estas declaraciones. Mientras algunos expertos consideran que el maquillaje de cifras era un «secreto a voces», también señalan que puede haber variaciones en la contabilidad debido a la complejidad de factores, como la inclusión o exclusión del gas producido y desperdiciado en la Amazonía, así como pinchazos en poliductos.
El Diario solicitó al ministerio un informe que respalde las denuncias de la ministra Arrobo, pero hasta ahora solo se ha indicado que «cuando exista un pronunciamiento oficial, se entregará dicha información». Expertos consideran estas afirmaciones como apresuradas y advierten sobre posibles repercusiones negativas para la reputación de la industria y las relaciones comerciales.
Rafael Correa, expresidente, se pronunció en contra del contrato de trabajo por horas y a plazo fijo propuesto en la consulta popular y referéndum del 21 de abril. Correa recordó que durante su gobierno se eliminaron estas modalidades y expresó su preocupación por la reducción de salarios que podría implicar.
Abogados especializados en temas laborales, como Angie Toapanta, opinan que el contrato por horas es precario y no garantiza los derechos establecidos en el Código del Trabajo. Estas críticas se suman a la preocupación expresada por diversos sectores de la sociedad ante las propuestas planteadas en la consulta popular.
En este contexto, la Ministra de Trabajo, Ivonne Núñez, ha anunciado que ya se han realizado cálculos matemáticos para determinar el costo de la hora en el contrato de trabajo por horas. Según sus declaraciones, se pagarían entre USD 5 y 6 por hora de trabajo, aunque destaca que la tabla sectorial será determinante en este proceso.
La consulta popular y referéndum del 21 de abril incluirá preguntas sobre el contrato de trabajo por horas y a plazo fijo. La propuesta ha generado debates y divisiones en la sociedad ecuatoriana, con sectores que la respaldan y otros que la critican por considerarla perjudicial para los trabajadores.
