En una serie de conversaciones filtradas en un chat entre la relacionista pública Mayra Salazar y la expresidenta de la Corte Provincial de Justicia del Guayas, Fabiola Gallardo, se desvela un presunto intento de cambiar la imagen de José Adolfo Macías Villamar, conocido como Fito.
El intercambio entre Salazar y Gallardo, ambas procesadas en los casos Metástasis y Purga, respectivamente, tuvo lugar el 8 de septiembre de 2023.
En el mensaje, Salazar, quien trabajaba como analista de Comunicación para Gallardo, sugiere que Fito se veía «todo panzón» y le propone hacerle la «manga», aparentemente refiriéndose a algún tipo de cambio físico.
Gallardo, en respuesta, entre risas, le pide a Salazar que le envíe una tarjeta de su médico, a lo que Salazar responde que «ya arreglaba eso».
La conversación se produjo después de que Salazar adjuntara una fotografía de Fito y en medio de un análisis sobre la decisión del juez Diego Poma de devolver a Fito a la Cárcel Regional de Guayaquil.
Fito había sido trasladado al centro de privación de libertad de máxima seguridad el 12 de agosto de 2023, pero Poma resolvió su regreso a la Cárcel Regional el 8 de septiembre de ese año.
Gallardo expresó su interés en conocer a Fito, pero la única opción para hacerlo era a través de Salazar. Esta última planeaba utilizar su fundación para ingresar a la cárcel y entablar amistad con Fito.
El propósito inicial era cambiar la imagen de Fito, como parte de una traición a Norero, con quien Gallardo mantenía una relación. Para Norero, Fito era considerado un enemigo.
Cambios de Imagen y Estrategias de Evasión
La idea de que los individuos privados de libertad o con antecedentes delictivos busquen modificar su apariencia para eludir la justicia no es nueva.
Un caso similar se ha vinculado con Wilmer Chavarría, alias Pipo, líder de Los Lobos, quien habría fingido su muerte y estaría viviendo en Turquía. Esta situación fue mencionada por el exministro del Interior, José Serrano, y también aparece en los chats del Caso Purga.
En 2020, mientras estaba encarcelado en la cárcel de Turi, en Cuenca, Pipo seguía dando órdenes respaldado por su financista, Leandro Norero, quien también había fingido su muerte.
Aunque se informó que Pipo fue uno de los 34 presos asesinados en la masacre de Turi en febrero de 2021, su cuerpo nunca fue encontrado. Se especuló que había huido a Turquía con identidad falsa y tras cirugías plásticas.
Los líderes de organizaciones criminales suelen someterse a cambios de imagen, incluyendo cortes de cabello y cirugías, como parte de sus estrategias de evasión.
Fito, por ejemplo, mostraba sobrepeso en septiembre de 2023, pero, según reportes, apareció más delgado y con el cabello corto después de su fuga de la Cárcel Regional de Guayaquil en enero de 2024. Hasta el momento, no ha sido recapturado.
