El anuncio del presidente Daniel Noboa de que se gestionó un intento de golpe de Estado en enero de 2024, es algo que fue cuestionado por el analista político César Febres-Cordero Loyola y es que considera que no existe una evidencia sólida que respalde la acusación presidencial.
Argumentó que, según la literatura de Ciencias Políticas, un golpe de Estado implica un intento organizado y deliberado por parte de actores internos para derrocar al Gobierno. Sin embargo, dice que en enero lo que se vieron fueron actos de violencia relacionados con los traslados de los presos y motines para cubrir la fuga de «Fito» y otros.
Ante ello, sugiere que las declaraciones de Noboa podrían formar parte de una estrategia política para consolidar su poder y movilizar a las Fuerzas Armadas del Ecuador. El objetivo es «mantener el discurso de la guerra» que le «funcionó» para ganar la consulta popular, todo podría tratarse de una «campaña electoral».
Por otro lado, Febres-Cordero también criticó la falta de claridad y sustento en las políticas y comunicaciones del gobierno, y advierte sobre el riesgo de perder apoyo si no se abordan adecuadamente los problemas de seguridad y economía.
