Cinco exlegisladores presentaron una Acción Pública de Inconstitucionalidad y solicitaron Medidas Cautelares contra el Decreto Ejecutivo 741 del Presidente Guillermo Lasso, que disolvió el Parlamento. Según la exasambleísta Mireya Pazmiño, en una entrevista en Notimundo al Día, esta medida fue considerada ilegal y se afirma que su único propósito era evitar el regreso del expresidente Rafael Correa al poder.
Durante la entrevista en Notimundo al Día, Mireya Pazmiño, exasambleísta por Pachakutik, expresó su rechazo a la disolución de la Asamblea Nacional y afirmó que no se cumplían las condiciones establecidas en la Constitución para tomar esta decisión.
Según Pazmiño, el Legislativo no asumió funciones indebidas ni obstaculizó el Plan Nacional de Desarrollo, y no se encontraba una grave crisis política ni conmoción interna, los cuales son requisitos necesarios para aplicar la "muerte cruzada", a partir de lo cual el Presidente Lasso tomó su decisión.
La exasambleísta explicó que el juicio político en contra del Presidente buscaba prevenir la corrupción "demostrada" en las empresas estatales, de la cual se supone que el Presidente tenía conocimiento pero no tomó medidas al respecto. Además, Pazmiño argumentó que la Corte Constitucional debería aceptar la acción de inconstitucionalidad presentada, para que se pueda reanudar el proceso de fiscalización al gobierno de Lasso, que fue suspendido "de manera injusta" mediante la aplicación de la "muerte cruzada".
Pazmiño reconoció la desaprobación ciudadana hacia la gestión del Parlamento, cuya popularidad no superaba el 4% hasta su último día en funciones. Sin embargo, afirmó que ella ha sido una excepción, ya que ha trabajado en beneficio de los ciudadanos. Aseguró que ha sido objeto de intentos de desprestigio, pero no existe ninguna evidencia en su contra y que siempre ha actuado correctamente, de manera transparente y en contra de la corrupción.
Por último, advirtió que los decretos firmados por Lasso deben ser en beneficio de toda la población, de lo contrario, "no solo la Conaie se levantará, sino todo el pueblo ecuatoriano".