En el cantón San Pedro de Huaca, ubicado a 21 km de Tulcán, en Carchi, las fuertes precipitaciones dejan estragos especialmente en la malla vial. La noche del 1 de noviembre el desbordamiento del río Chiquito dejó incomunicadas a tres comunidades.
En la Y, la carretera que conduce hacia los sectores de Guananguicho Norte (vía asfaltada) y Yambá (vía de segundo orden), las constantes lluvias registradas y acumuladas en los dos últimos días conformaron una piscina, anegando este lugar.
Piedras, palos y materiales vegetales se concentraron en este sitio, obstruyendo un canal metálico, que permitió que el agua fluya y se concentre en este espacio, impidiendo la circulación vehicular.
Maquinaria municipal realizó trabajos de desfogue y limpieza para habilitar el paso de vehículos hacia los sectores de Guananguicho Norte, Yambá y El Rosal.
El alcalde Armando Paillacho informó que el domingo debieron solicitar maquinaria del Gobierno Provincial de Carchi para acelerar las labores para rehabilitar los accesos hacia esas comunidades.
“Ventajosamente no se quedaron vehículos anegados ni hubo afectaciones de cultivos”, agregó el funcionario. Frente a las obras emergentes que se ejecutan en el desvió hacia Yambá, este ramal está temporalmente inhabilitado, debiendo los usuarios utilizar la vía alterna a Pistud.
Mauricio Villota, vocero municipal, dijo que la vía asfaltada que conecta con los poblados de Guananguicho Norte y El Rosal ya fue habilitada, y los problemas en el ingreso a Yambá estarían a punto de solucionarse.
Mientras que en Tulcán, una fuerte granizada y lluvia que cayó después del mediodía acumuló agua e inundo viviendas en el barrio Tajamar, donde fue evacuada agua y destapados sumideros.
En cambio, en la localidad rural de Chapués el Cuerpo de Bomberos realizó una perforación en una pared para expulsar el agua lluvia.
(El Universo)