Ecuador termina 2021 con unos 335.000 contagios adicionales a los de 2020, para un total de 547.186 hasta este jueves, pero con una pandemia más o menos contenida y una incipiente recuperación económica, gracias a la fugaz vacunación de 12.6 millones de personas.
Comparado con los dramáticos momentos de marzo a mayo de 2020, cuando la imágenes de cadáveres por las calles de Guayaquil ocuparon los titulares de todo el mundo, o con el colapso de los hospitales hasta el primer trimestre de 2021, la situación de Ecuador ha mejorado de forma inusual en la segunda mitad del año.
Porque pese al crecimiento anual de un 158 % en los contagios, se ha registrado una notoria bajada en la ocupación hospitalaria y los fallecimientos.
LA VACUNACIÓN
Detrás de esta contención, que por supuesto ha tenido sus paréntesis en coincidencia con períodos de fiestas locales, está una masiva vacunación entre mayo y septiembre.
En Ecuador el 78 % de la población objetivo mayor de 5 años está vacunada con pauta completa, y casi un millón de ellos con dosis de refuerzo, producto de una enérgica acción de parte del actual mandatario Guillermo Lasso, que en su campaña electoral había prometido poner fin al desorden de meses anteriores en los que el país se vio casi sin vacunas.
Danilo Calderón, que durante 2020 fue director de uno de los hospitales centinela contra la covid-19 en Quito, explicó a Efe que la vacunación han contribuido a que los contagios "no sean de la misma manera". "Sí, es verdad que puede haber más contagios, pero ya no son de la misma forma con la resistencia inmunológica que representa la vacuna", afirmó al comparar ambos períodos.
La vacunación contribuyó a una reducción considerable de la presión sobre el sistema de salud y, en particular, sobre las unidades de cuidados intensivos (UCI), saturadas hasta los pasillos a lo largo de 2020 y también durante los primeros meses de 2021. Los elevados incrementos este diciembre en los contagios, sumado a la llegada de la variante ómicron al país (24 casos confirmados y 27 bajo sospecha), han encendido la luz roja y las autoridades han declarado la inmunización como "obligatoria".
No se trata de que "un militar o un policía va a llegar a uno a la vacunación", explicó a Efe el presidente del Colegio de Médicos de Pichincha, Víctor Álvarez, sino de establecer "un marco legal" para que "las resoluciones del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) no sean solamente exhortos" y sirvan para aplicar sanciones. (Ecuavisa)