Durante su participación en la II Conferencia Internacional sobre Seguridad Penitenciaria, el presidente Daniel Noboa afirmó que su gobierno fue objeto de un intento de golpe de Estado en enero de 2024.
En su discurso, Noboa describió una serie de eventos violentos que sacudieron al país a principios de año, incluyendo ataques con explosivos a nivel nacional, motines en prisiones y la toma de un canal de televisión en Guayaquil. Estas acciones llevaron a la declaración de un conflicto armado interno en Ecuador.
El mandatario afirmó que durante estas difíciles circunstancias se produjo un intento coordinado para desestabilizar su gobierno. «Vimos cómo se intentó un golpe de Estado en las dos primeras semanas de enero. Trataron de desestabilizar al gobierno de todas las formas», declaró Noboa.
Además, Noboa señaló que su administración ha enfrentado al crimen organizado, llegando incluso a recibir amenazas directas contra su familia por parte de líderes de grupos narcoterroristas.
El evento contó con la participación de la fiscal general del Estado, Diana Salazar, y representantes de la Unión Europea. Salazar elogió el compromiso del presidente Noboa en la lucha contra la corrupción y agradeció su apoyo para llevar a cabo investigaciones que han desmantelado estructuras criminales en varias instituciones estatales.
En respuesta a estos desafíos, Noboa anunció la creación de una Unidad de Investigación Conjunta para combatir la economía de las organizaciones criminales. También hizo referencia a la existencia de lo que denominó «terroristas de cuello blanco» en el país, refiriéndose a los casos Metástasis y Purga.
