En un discurso lleno de emotividad y compromiso, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, anunció que a partir del 2 de mayo de 2024, el país romperá relaciones diplomáticas con Israel. Este pronunciamiento se realizó durante un evento en el que el mandatario expresó su firme solidaridad con Palestina y su rechazo a las acciones del gobierno israelí.
El presidente Petro destacó la necesidad de rebelión y resistencia frente a la situación en Gaza, resumiendo el sentimiento mundial de solidaridad con Palestina. Según el mandatario, la humanidad entera está de acuerdo en que no se puede permitir el genocidio ni el exterminio de un pueblo ante los ojos del mundo.
Esta decisión se enmarca en la postura crítica del gobierno colombiano hacia Israel, reflejada en movimientos diplomáticos recientes. Colombia respaldó una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que solicitaba un cese al fuego en la región, marcando una posición clara en el conflicto.
Aunque Colombia ha mostrado su apoyo a Palestina, el gobierno no ha condenado explícitamente los ataques de Hamás, lo que ha generado tensiones diplomáticas. La llamada a consultas de la embajadora colombiana en Israel, Margarita Manjarrez, evidencia las tensiones entre las dos naciones.
El presidente Petro hizo un llamado a la comunidad internacional para reconocer la gravedad de la situación y trabajar juntos hacia una solución pacífica. Esta declaración no solo respalda a Palestina, sino que también representa un compromiso con los derechos humanos y la diplomacia como vías para resolver conflictos globales.
