El presidente de la República, Daniel Noboa, reiteró su firme oposición a la Corte Constitucional tras la impugnación de las reformas legales aprobadas para combatir el terrorismo en Ecuador. En un pronunciamiento oficial, Noboa expresó que no permitirá que la Corte tire abajo las leyes aprobadas por la Asamblea Nacional que buscan fortalecer la lucha contra el crimen organizado y garantizar la seguridad del Estado.

El mandatario calificó la decisión de la Corte como un obstáculo para la implementación de políticas públicas orientadas a enfrentar la creciente amenaza del terrorismo en el país. Además, advirtió que este tipo de acciones judiciales pueden generar incertidumbre en las instituciones y en la ciudadanía, socavando los esfuerzos del gobierno por restablecer el orden y la paz social.

Noboa enfatizó que su administración continuará trabajando en la implementación de estrategias de seguridad que involucren a las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, con el objetivo de neutralizar a las organizaciones terroristas que operan en el territorio ecuatoriano. Asimismo, aseguró que se mantendrá el compromiso con la reforma del sistema judicial para garantizar su independencia y eficacia en la lucha contra el crimen.

Esta postura del presidente ha generado reacciones divididas en el ámbito político y social. Mientras algunos sectores respaldan la decisión del Ejecutivo, argumentando que es necesario tomar medidas contundentes para enfrentar la amenaza del terrorismo, otros advierten sobre el riesgo de vulnerar el Estado de derecho y los principios constitucionales.

La controversia entre el Ejecutivo y la Corte Constitucional pone de manifiesto las tensiones existentes entre los poderes del Estado en Ecuador, en un contexto de creciente preocupación por la seguridad y el orden público en el país.