El alcalde de Guayaquil, Aquiles Alvarez, lanzó fuertes críticas contra el presidente Daniel Noboa por la actuación en la ciudad de la Fundación Jóvenes Contra el Hambre, a la que acusó de funcionar como una herramienta de propaganda política financiada con recursos públicos. Durante una rueda de prensa, Alvarez cuestionó la verdadera finalidad de la fundación y denunció su presencia como una forma de intromisión del Gobierno Central en competencias municipales.
Según el alcalde, la fundación responde directamente a intereses del régimen y no a un compromiso genuino con la atención social. “Guayaquil no necesita fundaciones afines al poder central para cumplir con su labor social. Esa es una competencia del gobierno local”, afirmó. Además, advirtió que estas acciones buscan debilitar a administraciones municipales que no están alineadas con el oficialismo.
Alvarez también criticó la falta de coordinación institucional, señalando que si el Gobierno desea implementar programas sociales, debe hacerlo a través del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) y no mediante organizaciones que, según él, carecen de transparencia y neutralidad.
“No nos oponemos a la ayuda social, pero debe ser bien ejecutada y con honestidad. Lo que no permitiremos es que se usen estas causas para hacer campaña política anticipada”, recalcó.
Hasta el momento, el Ejecutivo no ha respondido a estas declaraciones. La polémica ha encendido nuevamente el debate sobre el uso de fundaciones con fines políticos y las tensiones entre el Gobierno Nacional y los municipios, especialmente en el contexto guayaquileño.
La población necesita servicios y si el Gobierno le da que mejor. Ya no creemos en el Alcalde