La reciente fuga de alias “Fede”, cabecilla de la banda criminal “Las Águilas”, desde una prisión supuestamente militarizada, pone en evidencia la profundidad de la crisis penitenciaria que enfrenta Ecuador. El abogado penalista Mauricio Barros, entrevistado en el programa Ecuadorenvivo, alertó que las cárceles se han convertido en verdaderos centros de operaciones del crimen organizado, con una estructura corrupta que involucra a custodios, militares y policías.
“Esto no fue improvisado, fue una planificación que tomó meses y contó con complicidad interna”, afirmó Barros, cuestionando cómo un uniforme militar pudo haber ingresado al centro sin la venia de las autoridades. Añadió que, mientras los agentes piensan en custodiar, los reos planean constantemente cómo fugarse. “Las bandas no solo mandan dentro de la cárcel, también extorsionan fuera, usando las telecomunicaciones internas”, subrayó.
La conversación derivó en una crítica directa a la falta de acción política. Aunque el gobierno asegura tener voluntad para enfrentar la criminalidad, Barros considera que sin una estrategia integral, inversión real y una depuración institucional, los problemas se perpetuarán.
“Ya no basta con indignarse o salir en rueda de prensa. Subieron el IVA para fortalecer la seguridad, pero los crímenes también subieron. ¿Dónde está el plan?”, preguntó Alfonso Pérez Serrano, conductor del espacio.
Ambos coincidieron en que el sistema necesita reformas estructurales: rotación del personal penitenciario, inteligencia carcelaria real, inhibidores de señal eficaces, clasificación adecuada de reclusos, protección a funcionarios vulnerables y rehabilitación productiva en el modelo suizo.
Barros fue claro al decir que no todos los privados de libertad son recuperables, pero tampoco es aceptable que se mezclen personas sin antecedentes violentos con líderes de mafias. También instó a que la Fiscalía actúe con rigor, técnica y prudencia: ni sobreperseguir sin pruebas ni dejar impunes a los responsables.
Mientras la ciudadanía normaliza las noticias de muertos diarios y fugas de alto perfil, los expertos insisten en que aún es posible recuperar la seguridad, pero con decisiones firmes. “Si no actuamos ya —concluyó Barros— las cárceles seguirán siendo búnkers criminales, y la impunidad, su mejor aliada”.
0 comentarios