Este martes se instaló en la Corte Nacional de Justicia la audiencia de juicio contra el exvicepresidente Jorge Glas, en el marco del proceso judicial relacionado con el presunto mal manejo de fondos asignados para la reconstrucción de Manabí tras el terremoto de 2016.

Glas llegó acompañado de familiares y simpatizantes, quienes se concentraron en los exteriores del tribunal para manifestarle su respaldo. Entre ellos se encontraban allegados y militantes afines a la Revolución Ciudadana, quienes entonaron consignas de apoyo y calificaron el proceso como una “persecución política”.

En esta causa, la Fiscalía acusa a Jorge Glas de presunto peculado por su supuesta participación en una estructura que direccionó contratos de obras públicas financiadas con recursos de emergencia. El exvicepresidente ha reiterado su inocencia y ha denunciado en múltiples ocasiones que es víctima de una campaña judicial en su contra.

Durante la instalación de la audiencia, el tribunal escuchó los argumentos iniciales de las partes procesales. La Fiscalía presentó los elementos que, según afirma, demostrarían que existió un manejo irregular de los fondos de reconstrucción. Por su parte, la defensa de Glas cuestionó la validez de las pruebas y afirmó que no existen elementos que sustenten una condena.

Se prevé que el juicio se extienda por varios días, debido a la complejidad del caso y la cantidad de testigos y pruebas documentales convocadas.

Este nuevo proceso judicial se suma a las causas previas por las que Jorge Glas ha enfrentado condenas, incluida la de asociación ilícita en el caso Odebrecht y cohecho en el caso Sobornos. Sin embargo, en este juicio la atención pública y política vuelve a centrarse en el manejo de los recursos destinados a una de las mayores emergencias que ha vivido el país en las últimas décadas.