La Asamblea Nacional abrió nuevamente el espacio para debatir y aprobar una ley más integral y con enfoque de derechos para las personas con discapacidad. El pasado jueves 5 de junio, durante la sesión plenaria Nº 008 presidida por Niels Olsen, se archivó el Informe del proyecto reformatorio que no contemplaba las necesidades reales de los colectivos afectados .

Con ese paso, el Legislativo despeja el camino para continuar con un nuevo texto que, según anunciaron las autoridades, será más técnico, participativo e inclusivo, superando los vacíos detectados en la versión anterior. Los representantes sociales habían advertido que la propuesta carecía de soluciones concretas para mejorar la accesibilidad y el ejercicio de derechos fundamentales .

Se espera que en los próximos días la Comisión de los Derechos Colectivos, Comunitarios y de la Interculturalidad inicie el análisis detallado del nuevo borrador. La meta es contar con un marco legal robusto, alineado con los estándares internacionales y diseñado con la participación directa de personas con discapacidad, organizaciones de la sociedad civil, expertos técnicos y autoridades públicas .

La iniciativa ha generado expectativas positivas entre los defensores de los derechos humanos, ya que la nueva ley podría incluir asuntos esenciales como accesibilidad universal, inclusión laboral, salud adecuada y educación, además de garantizar mecanismos efectivos de participación ciudadana. Se prevé que el nuevo debate incluya también estudios actuariales sobre el impacto financiero, en cumplimiento del llamado de la Corte Constitucional tras la objeción presidencial parcial de inconstitucionalidad .

Con este giro, la Asamblea busca cerrar una etapa marcada por deliberaciones técnicas y retomar el impulso para consolidar una norma que reconozca de manera efectiva los derechos de las personas con discapacidad en Ecuador.