El movimiento indígena Pachakutik (PK) anunció que los asambleístas de su bloque que voten a favor de la Ley Orgánica de Solidaridad Nacional, calificada de económico urgente, serán expulsados del partido. La advertencia fue emitida en una resolución aprobada durante su XX Consejo Político Nacional, realizado el viernes 6 de junio en Quito.

“Serán automáticamente sancionados con la separación definitiva del partido”, indicó el comunicado, en referencia a la votación prevista para este sábado 7 de junio en la Asamblea Nacional. Además, el movimiento inició un proceso de investigación y control disciplinario contra su bloque actual por haber incumplido la “línea política nacional”.

PK, que cuenta con nueve legisladores, ha sido considerado un bloque clave para alcanzar mayorías en el Parlamento. Sin embargo, algunos de sus integrantes han apoyado iniciativas impulsadas por el Gobierno, como la reciente reforma que habilita la instalación de bases militares extranjeras en el país.

El movimiento rechazó de forma categórica el proyecto de ley económica impulsado por el Ejecutivo, al considerar que “no favorece ni permite salidas a la crisis económica y de inseguridad que vive el país”, y exigió a sus legisladores que lo voten en contra y promuevan su archivo.

Investigación y sanciones

El Consejo Político Nacional resolvió que su Tribunal Nacional de Ética y Disciplina inicie investigaciones a los asambleístas que no se alineen con las decisiones colectivas del movimiento. Mientras dure el proceso, los legisladores que respalden al Gobierno “no podrán utilizar los símbolos ni hablar en nombre del movimiento Pachakutik”.

Además, se estableció que se aplicarán sanciones a todas las autoridades electas y adherentes que incumplan las resoluciones del partido. Se exhortó a las coordinaciones provinciales a respetar las decisiones de los órganos nacionales y fortalecer los vínculos con las bases.

Formación política y fortalecimiento interno

Entre otras decisiones, PK acordó implementar talleres de formación política sobre seguridad y la presencia de bases extranjeras; aprobar un reglamento para la organización de congresos provinciales, e iniciar procesos internos de democracia para elegir nuevas coordinaciones provinciales.

Finalmente, el movimiento reiteró su compromiso con la defensa de los derechos humanos, colectivos y de la naturaleza, y anunció que continuará construyendo alianzas con sectores sociales como trabajadores, jóvenes, mujeres, jubilados y ambientalistas.