La política proteccionista de Donald Trump volvió a sacudir el tablero global este sábado 31 de mayo de 2025. El presidente de Estados Unidos anunció que duplicará del 25% al 50% los aranceles al acero, una medida que ya provocó la reacción inmediata de la Unión Europea, que advirtió que tomará represalias.

El anuncio lo hizo durante un acto en una planta de US Steel en Pensilvania, uno de los estados clave en el mapa electoral y símbolo de la industria metalúrgica estadounidense. “Nadie va a eludir eso”, dijo Trump ante los trabajadores, entre vítores de “¡USA, USA!”.

Desde su retorno a la Casa Blanca en enero, Trump ha relanzado su agenda comercial dura: impuestos del 25% a productos clave como aluminio, acero y automóviles, incluso dirigidos a países aliados como Canadá, México o miembros de la UE. La nueva alza en los aranceles, sin previo aviso, generó malestar entre los europeos, que acusan a Trump de “socavar las negociaciones” en curso.

América Latina entre los más afectados

Según datos de la Administración de Comercio Internacional, Brasil es el segundo mayor exportador de acero a EE.UU. con 3,7 millones de toneladas métricas en el último año, seguido por México con 2,9 millones. En el caso del aluminio, Argentina, bajo la administración de Javier Milei, figura como el sexto proveedor, con más de 176.000 toneladas enviadas a EE.UU. en 2024.

¿Una venta japonesa con sello estadounidense?

En el mismo evento, Trump defendió la controvertida fusión de US Steel con la japonesa Nippon Steel, un acuerdo valorado en 14.900 millones de dólares. Aseguró que “US Steel seguirá bajo control estadounidense”, que no habrá despidos ni externalización, y que el convenio generará 70.000 empleos.

Sin embargo, el sindicato United Steelworkers (USW) puso en duda estas promesas. “Emitir comunicados es fácil, lograr compromisos reales es lo difícil”, advirtió David McCall, su directivo. Acusó a Nippon Steel de tener un historial de violaciones a las leyes comerciales y expresó su preocupación por la seguridad nacional.

Trump dijo que aún no ha dado luz verde definitiva al acuerdo. “Tengo que aprobar el texto final, y todavía no lo hemos visto”, afirmó en su regreso a Washington.

Mientras tanto, la Unión Europea evalúa sus próximos pasos en esta nueva escalada comercial. La guerra de aranceles parece lejos de terminar.