Un intento de extorsión en Guayaquil acabó con un desenlace inesperado la noche del viernes 30 de mayo: el artefacto explosivo que un delincuente arrojó contra un local comercial terminó estallando en sus propias manos.
El hecho ocurrió en las calles Décima y Ayacucho, en el sector 9 de Octubre, donde un hombre lanzó un explosivo contra una importadora de repuestos. Sin embargo, la manipulación fallida del artefacto provocó que la explosión lo alcanzara directamente, causándole graves heridas.
Según testigos, el sujeto huyó a bordo de una motocicleta junto a otro individuo, pero en la escena quedaron restos de dedos y huesos esparcidos en la acera y un poste de luz, lo que dejó en evidencia la magnitud de la explosión.
El estallido también causó daños en el local comercial, destruyendo las ventanas y afectando la carrocería de un vehículo que estaba estacionado cerca. El guardia de seguridad del establecimiento alertó de inmediato a los propietarios y a la Policía Nacional, que desplegó un operativo en la zona.
Horas después, el antisocial fue capturado y permanece bajo custodia policial mientras avanzan las investigaciones. Las autoridades ya revisan las cámaras de videovigilancia del sector para identificar al segundo implicado que escapó del lugar.
0 comentarios