El analista internacional Jorge Ortiz no se guardó nada al opinar sobre la visita del presidente colombiano Gustavo Petro a la posesión de Daniel Noboa. En entrevista con Ecuavisa, Ortiz calificó de “ridículo”, “contradictorio” y “pobre” el papel que desempeñó Petro durante su breve estancia en Quito.

El internacionalista señaló que Petro optó por una postura “torpe” al asistir a la ceremonia de investidura de un presidente al que no reconoce. “No fue estadista ni fue frontal. Quiso quedar bien con todos, pero terminó quedando mal con todos”, dijo Ortiz, quien además aseguró que fue Colombia, no Ecuador, la que resultó ofendida por la actuación errática de su mandatario.

Petro llegó tarde al evento y, minutos después de aterrizar, publicó un mensaje en X donde hablaba de la Gran Colombia y comparaba la elección venezolana —calificada como fraudulenta por la comunidad internacional— con el proceso electoral ecuatoriano, una postura que Ortiz calificó como “una barbaridad” que revela “limitaciones intelectuales”.

También criticó que Petro pidiera la liberación de Jorge Glas, a quien llamó “preso político”, pese a no reconocer la legitimidad del gobierno de Noboa. “Vino a pedir favores a quien llama ilegítimo. Es incoherente”, dijo Ortiz. Añadió que su presencia fue un “desaire” más que una ofensa, y consideró que la mejor respuesta del Ecuador fue ignorarlo.

Ortiz también mencionó que el propio ex canciller de Petro, Álvaro Leyva, lo ha acusado de tener adicciones, lo que pondría en duda su capacidad para gobernar. “Es un presidente que ha hecho retroceder a Colombia, que ha descompuesto su propio gabinete y que ha frenado el avance de una economía que prometía mucho”, concluyó.