La violencia vuelve a golpear al sistema carcelario ecuatoriano. La tarde del domingo 20 de abril, Darwin Alfonso B. P., de 30 años, fue hallado muerto en su celda, ubicada en el ala 2 del pabellón 11 de la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil.

Policías y personal de Medicina Legal ingresaron al centro penitenciario pasadas las 16:30 para realizar el levantamiento del cuerpo. Aunque se desconocen las causas exactas de la muerte, el detenido presentaba heridas visibles en el rostro, específicamente en el pómulo y cerca del ojo izquierdo.

Darwin cumplía una sentencia de tres años por tenencia ilegal de armas, desde 2024. También había estado preso anteriormente por tráfico de drogas a mediana escala en dos ocasiones, ambas en 2022.

Este caso eleva a cuatro los internos fallecidos en apenas seis días en la Penitenciaría del Litoral, una cárcel marcada por el hacinamiento, la crisis sanitaria y la presencia de grupos criminales. El pasado martes 15 de abril, otros tres reos fueron encontrados sin vida en los pabellones 2, 8 y 11.

La muerte de estos internos ocurre en medio de un rebrote de tuberculosis y una creciente reorganización de bandas dentro del penal, donde Los Lobos y Los Tiguerones continúan disputándose el control de los pabellones.