Un estudio científico encendió las alarmas en Galápagos al revelar que las fuentes de agua en tres de sus islas más visitadas —Floreana, Isabela y Santa Cruz— presentan altos niveles de contaminación. La investigación fue desarrollada por el Instituto Nacional de Biodiversidad (Inabio), la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol) y universidades de Bélgica.
En Santa Cruz, la isla más poblada del archipiélago, el 39% de los sitios monitoreados presentaron contaminación por coliformes y Escherichia coli. En total se analizaron 66 puntos entre sistemas hídricos urbanos y naturales.
En Isabela, a solo 300 metros de una zona recreativa, se encontraron aguas residuales con altas concentraciones de amonio, E. coli y bajos niveles de oxígeno. Mientras tanto, en Floreana, el 94% de los nitratos hallados en el acuífero cercano al área urbana provenían de aguas residuales.
El Inabio advierte que estos problemas podrían afectar la salud humana y atribuye las causas a la presión del turismo, la urbanización y el mal manejo de las aguas residuales.
El estudio plantea la urgente necesidad de rediseñar los sistemas de tratamiento de agua, regular las fuentes públicas y privadas, e implementar prácticas sostenibles para proteger los ecosistemas y garantizar el acceso a agua segura en estas islas consideradas patrimonio natural de la humanidad.
0 comentarios