El alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, continuará ejerciendo sus funciones tras una decisión judicial que negó la prisión preventiva solicitada por la Fiscalía en su contra. El juez Renán Andrade consideró que no existían elementos suficientes para ordenar su encarcelamiento dentro del caso conocido como Triple A.

Álvarez es señalado por un presunto delito de comercialización ilegal de combustibles, pero ha defendido su inocencia desde el inicio y ha enfrentado el proceso sin ocultarse. “Aquí estoy, no he huido ni huiré”, expresó en redes sociales, donde también denunció irregularidades y nulidades dentro de la causa.

Aunque el juez impuso medidas cautelares —como la presentación periódica ante la justicia, prohibición de salida del país y uso de un grillete electrónico—, la defensa del alcalde sostiene que se trata de una medida desproporcionada frente a la falta de argumentos sólidos por parte del fiscal Carlos Alarcón.

Durante la audiencia de vinculación, realizada el 9 de abril, el fiscal presentó cargos contra Álvarez y otras diez personas. Sin embargo, la defensa del burgomaestre argumentó que el tiempo legal para nuevas vinculaciones ya había vencido y que el proceso está viciado desde su origen.

El propio alcalde ha afirmado que este caso es parte de una persecución política. “Este proceso tiene muchas nulidades. Más allá de eso, ganaremos con argumentos sólidos, que los tenemos”, escribió en su cuenta de X.

El caso Triple A surgió tras una denuncia en julio de 2024, relacionada con supuestas irregularidades en la venta de combustibles por empresas en las que Álvarez habría tenido participación como accionista. No obstante, hasta el momento, ninguno de los procesados ha recibido medidas de detención preventiva, y la defensa insiste en que no existen pruebas contundentes.