Desde el 31 de marzo, la nueva flota de trolebuses eléctricos comenzará a operar en Quito, según confirmaron las autoridades. Estas 60 unidades, adquiridas con una inversión de USD 35,3 millones, han superado las pruebas técnicas y mecánicas y prometen mejorar la movilidad en la ciudad.

Los nuevos trolebuses estarán equipados con pantallas informativas, sistema de ventilación, cargadores USB, cámaras de seguridad internas y externas, y señalética inclusiva. Además, su incorporación reducirá el tiempo de espera en estaciones y paradas, optimizando el servicio para miles de pasajeros.

Con esta renovación, Quito apuesta por un transporte más sostenible. Se estima que los trolebuses evitarán la emisión de 8.700 toneladas de CO2 al año y disminuirán en un 50% la contaminación auditiva en la capital.

Antes de su operación oficial, las unidades serán sometidas a la fase de “marcha blanca”, una serie de recorridos sin pasajeros para evaluar su desempeño en condiciones reales.