La justicia colombiana ratificó que el secuestro del político ecuatoriano Fernando Balda fue agravado, debilitando así los argumentos de defensa del expresidente Rafael Correa y del exsecretario de Inteligencia, Pablo Romero. Esta decisión fortalece la sentencia vigente contra Romero y complica la situación jurídica de Correa, quien, en caso de ser capturado o entregarse, deberá cumplir una condena de 9 años de prisión por este caso, según información difundida por Balda en sus redes sociales.

Además, la sala penal del tribunal de Bogotá condenó a la fiscal Consuelo Montañez a 8 años de cárcel por fraude procesal y prevaricato, al haber manipulado pruebas para favorecer a los responsables del secuestro.

Balda señaló que este fallo judicial desmonta la narrativa sostenida por Correa y su entorno, ya que la sentencia confirma la gravedad del delito y reafirma la responsabilidad de los implicados.