Las lluvias torrenciales que azotan el departamento peruano de Tumbes, fronterizo con Ecuador, han dejado hasta el momento más de 15.000 hectáreas de cultivos afectadas, de las cuales 5.000 ya se han perdido por completo. Así lo informó este miércoles 5 de marzo el ministro de Desarrollo Agrario y Riego de Perú, Ángel Manero.

El ministro calificó el temporal como “sumamente extraordinario y dañino”, asegurando que las precipitaciones han sido más intensas que las registradas durante el fenómeno de El Niño en 1983, a pesar de haber caído en solo unos días.

La situación se ha agravado por las lluvias en Ecuador, que han incrementado el caudal del río Tumbes, provocando desbordamientos y daños adicionales. En respuesta, el Gobierno peruano ha coordinado acciones con autoridades locales para ejecutar un plan de asistencia a los damnificados, que incluye la entrega de fertilizantes, semillas y la activación del seguro agrario catastrófico.

Además, se ha declarado el estado de emergencia en Tumbes y Zarumilla, medida que permitirá la compra de motobombas, la reparación de electrobombas comunitarias y la rehabilitación de infraestructura crítica.

El primer ministro, Gustavo Adrianzén, anunció que la emergencia se extiende a 90 distritos de 18 departamentos del país, sumándose a los 164 distritos ya declarados en crisis el pasado 26 de febrero.

Hasta el momento, las lluvias en Tumbes han dejado al menos 82 viviendas destruidas, 144 inhabitables y cerca de 3.000 afectadas, además de daños en escuelas, centros de salud y vías de comunicación. El alcalde de Tumbes, Hildebrando Antón, advirtió que el panorama es “sombrío” y urgió al Ejecutivo a tomar medidas más contundentes para enfrentar el desastre.