Una reciente investigación de La Posta reveló un escándalo en la adquisición de equipamiento para las Fuerzas Armadas del Ecuador. Según el informe, el Gobierno adquirió 31.000 chalecos y cascos con blindaje nivel 3 por un monto de 34 millones de dólares, pero un informe del Ejército confirma que estos no resistirían el impacto de una bala.

El contrato, que fue reservado, fue firmado por un delegado del ministro de Defensa, Gian Carlo Loffredo. Además, la empresa proveedora tenía prohibición de contratar con el Estado hasta el año 2029, lo que genera serias dudas sobre la legalidad del proceso de adjudicación.

El informe de expertos en armas del Ejército señala que el blindaje de estos chalecos es deficiente y pone en riesgo la vida de los militares que combaten el crimen organizado y el narcotráfico. De acuerdo con la investigación, el 80% de las Fuerzas Armadas se encuentra desprotegido debido a esta compra irregular.

Este escándalo ha generado indignación en distintos sectores del país, pues evidencia graves fallas en la contratación pública y expone a los militares a un peligro inminente en medio de la crisis de seguridad que enfrenta Ecuador. Hasta el momento, el Gobierno no ha emitido una respuesta oficial sobre estas denuncias.