El Gobierno ecuatoriano se pronunció tras el asesinato del teniente coronel Porfirio Cedeño Cedeño, comandante del Grupo de Operaciones Especiales de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE), ocurrido en la Vía a Daule, cerca de la Penitenciaría del Litoral. Cedeño se dirigía a Manta, donde tenía previsto participar en una ceremonia por los 30 años de la guerra del Cenepa, cuando fue atacado. En el atentado también resultó herido un cabo de la FAE.

A través de un comunicado oficial, la Presidencia calificó el crimen como una prueba del estado de guerra que vive Ecuador y destacó el compromiso de las Fuerzas Armadas en la lucha por la seguridad del país.

“Estos hechos evidencian el conflicto armado interno en el que estamos inmersos. La entrega de nuestras Fuerzas Armadas es inquebrantable y la respuesta del Gobierno será contundente contra quienes perpetraron este crimen”, señaló el comunicado.

Asimismo, ratificaron que el estado de excepción decretado el 3 de enero se mantendrá en vigor, subrayando que “la voluntad, la entrega y la lucha existen, pero las herramientas deben mantenerse”.

Minuto de silencio y mensaje del Ministro de Defensa

Durante la ceremonia en Manta, donde Cedeño debía asistir, los asistentes guardaron un minuto de silencio en su honor.

El ministro de Defensa, Gian Carlo Loffredo, también se pronunció, comparando la actual lucha contra la delincuencia organizada con la guerra territorial de décadas pasadas.

“Antes combatíamos por nuestro territorio; hoy enfrentamos una guerra contra el narcotráfico y la inseguridad“, expresó.

El ministro hizo un llamado a la acción:

“Hagamos que este minuto de silencio se transforme en un grito de guerra. Que nuestro repudio y nuestras acciones sean más contundentes que nunca”.

Además, subrayó que la sangre derramada por los patriotas debe alimentar la victoria sobre el crimen.

“No permitamos que la partida de nuestro compatriota sea en vano. Está en nuestras manos convertir este acto de cobardía en el fin de una era de terror“.

Loffredo concluyó afirmando que Ecuador no se rinde y sus Fuerzas Armadas tampoco, reafirmando el compromiso del Gobierno en la lucha contra el crimen organizado.