El exsecretario Anticorrupción, Luis Verdesoto, advierte que Ecuador enfrenta una crisis institucional profunda, con redes criminales infiltradas en el Estado, pero descarta que el país haya llegado a convertirse en un narcoestado. Destacó que el crimen organizado ha logrado permear sectores clave como la justicia, la política y las fuerzas del orden, lo que ha debilitado la capacidad del país para frenar su avance.
Para Verdesoto, el problema radica en la falta de un “escudo institucional” que proteja a la sociedad del crimen nacional e internacional. Señaló que entidades como la Contraloría han fallado en su rol de control y que se requiere una reforma urgente para fortalecer la transparencia en la gestión pública.
Además, advirtió que el lavado de activos sigue siendo un problema crítico dentro de la empresa pública, y que ataques recientes a sistemas de compra del Estado evidencian que las mafias están encontrando nuevas formas de operar.
El sociólogo también insistió en la necesidad de una estrategia integral de coordinación entre todas las funciones del Estado y una participación activa de la sociedad para combatir el crimen organizado. “No podemos seguir con reformas aceleradas y desordenadas. Necesitamos reconstruir las instituciones con un plan de largo plazo”, enfatizó.
Pese a la grave situación, Verdesoto cree que aún es posible recuperar el país, aunque advierte que la transformación del sistema de justicia y otras entidades podría tomar generaciones. “Quizás sean nuestros nietos quienes vean los resultados de estos cambios, pero debemos empezar ahora”, concluyó.
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