Las deportaciones de ecuatorianos desde Estados Unidos podrían generar un fuerte golpe a la economía del país, dependiendo de la magnitud con la que se implementen. El impacto variaría si se expulsa únicamente a los más de 32.000 ecuatorianos que ya tienen orden de deportación o si la medida se extiende a los 140.000 que actualmente se encuentran en situación migratoria irregular.

El pasado martes 28 de enero de 2025, un nuevo vuelo con migrantes ecuatorianos deportados aterrizó en el aeropuerto de Guayaquil, sumándose al tercer vuelo desde que Donald Trump asumió nuevamente la presidencia de EE.UU. Esta política de retorno forzoso plantea serias dudas sobre las repercusiones financieras para Ecuador.

Según datos de la Cancillería, alrededor de 800.000 ecuatorianos residen en Estados Unidos. Un análisis del economista Alberto Acosta Burneo advierte que, si se ejecuta la deportación de los 31.252 ecuatorianos con orden de expulsión, las remesas caerían en un 4%, lo que representa una pérdida de al menos 200 millones de dólares anuales para la economía ecuatoriana.

Sin embargo, si las deportaciones alcanzan a los 140.000 ecuatorianos en situación irregular, la reducción de remesas podría llegar al 18%, lo que significaría una disminución de 875 millones de dólares al año. “Ecuador no está preparado para este golpe”, enfatizó Acosta Burneo.

La importancia de las remesas

En 2024, las remesas enviadas por migrantes ecuatorianos marcaron un récord, alcanzando más de 6.000 millones de dólares, cifra que supera en más de 22 veces la Inversión Extranjera Directa (IED) recibida por el país.

Ante este escenario, la incertidumbre crece sobre el futuro de los deportados en Ecuador. “El Estado no tiene capacidad para asumir esta situación. No hay empleo suficiente ni para quienes ya están en el país, menos para quienes regresen en masa. Se necesita un cambio urgente: atraer inversión privada, modernizar la legislación laboral y garantizar seguridad jurídica. Sin reformas, solo habrá más desempleo y crisis”, concluyó Acosta Burneo.