El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, juramentado el pasado viernes para un tercer mandato (2025-2031) en medio de denuncias de ilegitimidad, anunció este sábado que su país se prepara junto a los regímenes de Cuba y Nicaragua para “tomar las armas” si fuera necesario, defendiendo lo que calificó como “el derecho a la paz”.

Durante la clausura del “Festival Mundial Internacional Antifascista”, organizado por el chavismo, Maduro afirmó que Venezuela conformará una “gran alianza mundial” similar a la que enfrentó al fascismo en la Segunda Guerra Mundial.

“Si es por las buenas, avanzaremos. Y si es por las malas, también los venceremos”, declaró, insistiendo en que cualquier conflicto dependerá de acciones externas.

La reelección de Maduro ha sido catalogada como ilegítima por la oposición venezolana y por la comunidad internacional, incluidos Estados Unidos y la Unión Europea. Líderes opositores, encabezados por el presidente electo Edmundo González Urrutia, denuncian un fraude electoral masivo

El anuncio se da en medio de una creciente represión interna, con la ONG Foro Penal reportando 75 detenciones políticas solo en los primeros 11 días de enero. Mientras tanto, el país continúa enfrentando el aislamiento internacional y una severa crisis humanitaria.

Con su llamado a la “lucha armada legítima”, Maduro refuerza su postura beligerante, profundizando el conflicto con sectores críticos tanto dentro como fuera de Venezuela.