La Asamblea Nacional amaneció rodeada de vallas de seguridad, en medio de la creciente controversia entre el Legislativo y el Ejecutivo.

La medida se implementó tras la devolución del oficio en el que el presidente Daniel Noboa notificó el encargo de la Presidencia a Cynthia Gellibert mediante el Decreto Ejecutivo 500.

Aunque los legisladores están en vacancia desde el 8 hasta el 22 de enero, el conflicto no se detuvo. La Secretaría General de la Asamblea Nacional, liderada por Alejandro Muñoz, devolvió el oficio de Noboa, argumentando incumplimientos normativos.

Esta acción se dio por disposición de Esther Cuesta, presidenta encargada del Parlamento, quien respalda la postura de que Verónica Abad es la única reconocida como vicepresidenta encargada.

En respuesta, el presidente Noboa presentó una denuncia penal contra Muñoz por presunta usurpación y simulación de funciones. Muñoz calificó la acusación como “antijurídica e irracional”, alegando que busca intimidarlo en sus funciones.