Desde hace rato yo me refiero con minúscula a la que debe ser una de las más respetables funciones del Estado, porque -salvo escasas excepciones- la mayoría de sus integrantes no merecen representarnos, por tantas razones que son parte de la dura realidad que ahora vivimos.

Como ejemplo, traigo a colación que por desconocidas e irresponsables razones o por ocultos intereses, pese a que desde el 4 de diciembre del año anterior el Concejo de Participación y Control Social CPCCS, a la actual presidente de la asamblea del Ecuador, Viviana Veloz Ramírez, le comunicó y adjuntó la Resolución aprobada en Sesión Solemne del CPCCS de esa misma fecha, conteniendo la designación por ese mismo ente, de entre la terna enviada por el Ejecutivo, del Ec. Roberto Romero von Buchwald para que asuma de Superintendente de Bancos del Ecuador, hasta la fecha la actual presidente/asamblea han hecho oídos sordos, se han olvidado y/o han postergado sin ninguna razón valedera, la posesión de este funcionario para que asuma estas tan importantes funciones del convivir nacional.

Para abundar, Santiago Peñaherrera Navas en su calidad de Coordinador General de Asesoría Jurídica del CPCCS al presidente de la Corte Constitucional del Ecuador en amplia exposición, recibida por esa entidad el 9 de diciembre de 2024, dio fe de que el pleno de dicha entidad en la fecha ya mencionada designó Superintendente de Bancos al Ec. Roberto Romero von Buchwald.

El reciente 28 de diciembre de 2024 el mismo designado y hasta ahora no posesionado Superintendente de Bancos, se dirigió sin respuesta positiva a la ya mencionada primera autoridad de la asamblea nacional, con amplia y documentada exposición de sus 2 designaciones para tan alto cargo, en igual número de oportunidades, debido a su demostrada preparación, capacidad y méritos.

Por lo expuesto, extraña el desinterés de esta función y su principal autoridad, la cuestionada presidente de esa función del Estado, donde se aprecia sobremanera el enfrentamiento contra todo lo que proviene del Ejecutivo, como es ahora la urgente posesión de este tan necesario cargo de control y administración del sistema bancario nacional, actualmente en real acefalía por la falta del Superintendente. ¡Increíble!

Termino recordando que esta asamblea, recientemente dio un reconocimiento a un ente manabita de contexto internacional del que soy uno de sus fundadores desde hace más de 30 años, extrañamente sin primero darlo a su matriz radicada en Quito; sucedió quizás porque esta filial tiene ahora un nuevo directorio luego de un controvertido proceso eleccionario. Aprovecho esto para sugerirles a ellos que por medio de sus padrinos/contactos con esta asamblea, misma que tras un largo y muy profundo debate estableció, un día que no recuerdo, el festivo nacional del “Bizcocho de Cayambe”, por ello, esta vez gestionen que también así lo hagan por algo muy simbólico para Manabí, cual es, instaurar ahora el día festivo nacional de la “Rosquita de Montecristi”. Sin Comentarios.