Aunque el Gobierno anunció el fin de los apagones en los hogares ecuatorianos para este viernes 20 de diciembre de 2024, los cortes eléctricos continuarán afectando a sectores clave de la industria.

El Parque Industrial de Ambato, en Tungurahua, con más de 100 empresas enfrentará interrupciones de energía hasta las 22:00 del sábado.

Ante ello, para cumplir con los pedidos de diciembre, considerado un mes crucial para las ventas, las compañías han tenido que reorganizarse y acelerar la producción.

Ambagro, una empresa dedicada a la producción de insumos agrícolas, recurre a generadores eléctricos para cumplir con el 20% de los pedidos pendientes. Sus 35 trabajadores han ajustado turnos para evitar retrasos, reseña Ecuavisa.

Mientras tanto, firmas de helados como Bogati trabajan hasta 16 horas al día. Aunque la producción ha disminuido en un 10% desde el inicio de los apagones, la compañía espera recuperar terreno este mes.

“Incluso enviamos a algunos trabajadores de vacaciones para minimizar el impacto económico”, indicó Fidel Altamirano, analista de costos de la empresa.

En contraste, 12 empresas de cuero y calzado han cerrado temporalmente sus actividades, enviando a sus empleados de vacaciones anticipadas.

Cuenca

La situación es similar en el Parque Industrial de Cuenca, Azuay, donde los cortes de energía duran ocho horas diarias, de 23:00 a 07:00. Las pequeñas industrias redujeron su horario hasta las 20:00, mientras que las grandes empresas, como las productoras de cerámica, acero y madera, operan con generadores eléctricos para mantener las tres jornadas de trabajo.

Este parque industrial, que genera 100,000 empleos directos, enfrenta prolongados cortes que afectarán sus actividades hasta el 31 de diciembre, según las últimas estimaciones.

La dependencia de generadores no solo incrementa los costos operativos, sino que también limita la capacidad productiva de numerosas empresas, especialmente durante la temporada alta de ventas. Aunque el fin de los apagones llegó a su fin para los hogares, el sector industrial seguirá lidiando con las consecuencias de una crisis energética que no da tregua.