Este lunes, Dominique Pelicot, principal acusado en el juicio por agresiones sexuales sistemáticas a su exesposa Gisèle Pelicot entre 2011 y 2020, volvió a asumir su responsabilidad y señaló la culpabilidad de los otros 50 imputados en este caso que ha conmocionado a Francia y al mundo.
“Todos los que están aquí, a pesar de la presunción de inocencia, son culpables, como yo”, declaró Pelicot durante su última intervención en el tribunal de Aviñón, en el sur de Francia. El hombre, de 72 años, confesó haber drogado a su entonces esposa con altas dosis de ansiolíticos para violarla y facilitar que decenas de hombres también lo hicieran, poniendo en riesgo su vida en repetidas ocasiones.
Declaraciones finales antes del veredicto
El juicio, que se ha extendido desde el 2 de septiembre, está en su fase final. Este lunes, los acusados tuvieron la oportunidad de emitir sus últimas declaraciones antes de que los jueces comiencen las deliberaciones, cuyo resultado se anunciará el jueves.
Pelicot aprovechó la ocasión para reconocer el “coraje” de Gisèle Pelicot durante el juicio, así como para pedir disculpas tanto a ella como a su propia familia. “Lamento profundamente lo que hice y el sufrimiento que les he causado durante los últimos años. Les pido perdón”, afirmó visiblemente emocionado.
El acusado agradeció al tribunal por considerar su delicado estado de salud y concluyó su intervención con un mensaje dirigido a su familia: “Puedo decirles que los amo. Ahora, tienen el resto de mi vida en sus manos”.
El impacto del caso y el papel de Gisèle Pelicot
Gisèle Pelicot ha asistido a todas las audiencias con el rostro descubierto, convirtiéndose en un símbolo de resistencia y lucha contra la violencia de género. Su decisión de hacer público este proceso busca, según sus palabras, “que la vergüenza cambie de bando”.
Una mujer comentó frente al tribunal: “Justicia para Gisèle, justicia para todas”, al lado de un mural que representa a la víctima como ícono de esta lucha.
Cargos y evidencia abrumadora
Dominique Pelicot enfrenta la pena máxima de 20 años de prisión por violación agravada. La fiscalía también ha solicitado penas de entre 10 y 18 años para la mayoría de los otros 50 acusados, quienes enfrentan cargos similares por participar en estos crímenes, respaldados por miles de fotos y videos grabados por Pelicot que documentan los abusos.
Durante las declaraciones, algunos acusados negaron los hechos, mientras otros agradecieron el desarrollo del juicio o reiteraron disculpas. Jean-Pierre Maréchal, único procesado por crímenes contra otra mujer y no contra Gisèle Pelicot, también pidió perdón: “Júzguenme por lo que he hecho y lo que soy”, dijo.
Veredicto y expectativas
El presidente del tribunal anunció que las deliberaciones comenzarán de inmediato y que el fallo se espera para este jueves. Sin embargo, precisó que, dependiendo de la complejidad del caso, la decisión podría retrasarse al viernes.
La fiscalía ha dejado claro que este juicio busca marcar un precedente no solo por la gravedad de los hechos, sino por la necesidad de enviar un mensaje contundente contra la violencia sexual.
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