Tres hombres han presentado recientemente demandas contra Sean “Diddy” Combs, acusándolo de abuso sexual y de haber sido drogados. Estas demandas, interpuestas en Nueva York el pasado jueves, se suman a una serie de acusaciones que han surgido contra el productor musical desde que su exnovia, Cassie Ventura, lo demandó en noviembre, aunque el caso fue resuelto posteriormente.

Según los documentos legales, los presuntos hechos ocurrieron entre 2019 y 2020 y fueron presentados por demandantes anónimos bajo el seudónimo “John Doe”. Uno de ellos relata que fue invitado a una fiesta en los Hamptons, donde perdió la conciencia tras consumir bebidas en compañía de Combs. Al despertar, afirma haber sido abusado sexualmente por el artista y su entorno.

Otro demandante señala que en 2019 asistió a una fiesta en la suite de Combs en el Park Hyatt de Nueva York. Después de beber un cóctel, perdió el conocimiento y despertó siendo víctima de agresión sexual, mientras una pareja no identificada lo grababa. Finalmente, se le ofreció dinero en efectivo por parte del entorno de Combs.

El tercer caso ocurrió en 2020 cuando un hombre que había trabajado para Combs en 2006 se reunió con él para discutir pagos atrasados. Según la denuncia, tras aceptar una bebida ofrecida por el artista, perdió el conocimiento y posteriormente fue agredido sexualmente. Además, asegura que fue amenazado para que no acudiera a la policía.

En respuesta, los representantes legales de Combs calificaron estas demandas como “frívolas” y llenas de mentiras, prometiendo tomar acciones legales contra los abogados responsables.

Escándalos adicionales

En paralelo, el abogado Tony Buzbee ha involucrado al rapero Jay-Z en una demanda separada, acusándolo, junto a Combs, de presuntamente violar a una menor de 13 años en el año 2000. Jay-Z ha respondido categóricamente, calificando las acusaciones como un intento de extorsión y exigiendo que, de ser ciertas, se presenten cargos penales en lugar de una demanda civil.

Actualmente, Combs se encuentra en el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn, arrestado en septiembre por cargos relacionados con crimen organizado, tráfico sexual y prostitución. Su juicio está programado para mayo del próximo año, enfrentando una posible condena de cadena perpetua si se demuestra su culpabilidad.