El fracaso del pico y placa eléctrico: solo el 2% de las empresas lo adoptaron

Dic 12, 2024

El “pico y placa eléctrico”, una de las medidas destacadas por el gobierno de Daniel Noboa para mitigar los efectos de los apagones y evitar despidos masivos, terminó siendo un fracaso rotundo: únicamente 2 de cada 100 empresas en Ecuador acogieron esta política.

Implementada mediante el acuerdo ministerial Nro. MDT-2024-200 el pasado 22 de octubre, la medida buscaba flexibilizar la jornada laboral, permitiendo trabajar cuatro días a la semana con horarios extendidos de 10 horas diarias. Se plantearon dos opciones:

  • Lunes a jueves: 07:00 a 17:00.
  • Jueves a domingo: 07:00 a 17:00.

La ministra de Trabajo, Ivonne Núñez, afirmó en su momento que esta estrategia protegería empleos y garantizaría la continuidad económica. Sin embargo, según un estudio de Andeanecuador Consultores Estratégicos, solo el 2% de las empresas consideraron viable esta modalidad.

Críticas y limitaciones

Francisco Vergara, presidente de la Cámara de la Pequeña y Mediana Industria (Capeipi), cuestionó el alcance de la medida, señalando que estaba incompleta y requería coordinación con el Ministerio de Energía y Minas para programar racionamientos eléctricos por zonas.

Además, expertos en derecho laboral, como Vanessa Velásquez, destacaron que el impacto positivo del “pico y placa eléctrico” estaba condicionado a la capacidad de las empresas para adaptarse, dejando fuera de su alcance a pequeños negocios y emprendimientos. La experta advirtió que, pese a esta política, muchas pequeñas y medianas empresas enfrentan una difícil decisión: realizar despidos, especialmente en diciembre, mes que implica mayores obligaciones laborales por el pago del décimo tercer sueldo.

Soluciones alternativas frente a los apagones

Frente a la crisis energética, la mayoría de las empresas optaron por otras estrategias más prácticas:

  • 88% utilizó generadores eléctricos.
  • 26% implementó horarios flexibles.
  • 25% recurrió al teletrabajo.
  • 11% suspendió el teletrabajo para operar desde oficinas con energía de respaldo.
  • 5% redujo sus operaciones.

A pesar de estas medidas, los apagones prolongados (hasta 14 horas diarias) afectaron gravemente a las empresas:

  • 59% reportó aumentos en los costos operativos.
  • 22% sufrió retrasos en entregas.
  • 21% registró una caída en la producción.
  • 5% tuvo que despedir personal.

Demandas del sector empresarial

Las empresas han solicitado mayor flexibilidad laboral y apoyo financiero para enfrentar la crisis. Entre las principales peticiones están:

  • Regulaciones laborales más flexibles (42%).
  • Subsidios para la compra de generadores eléctricos (37%).
  • Asesoría técnica para optimizar el uso de energía (23%).

Asimismo, se destacó la necesidad de facilitar la importación de paneles solares, fomentar el uso de energías limpias y promover reformas tributarias que reduzcan el costo de la energía.

La implementación fallida del “pico y placa eléctrico” evidencia la desconexión entre las propuestas gubernamentales y las necesidades reales del sector empresarial en un contexto de crisis energética y económica.



Comentarios

0 comentarios


Te puede interesar





Lo último