El Dr. Medardo Mora Solórzano es un distinguido ciudadano manabita, de trascendentes ejecutorias desde la universidad y otras funciones públicas y privadas para beneficio de su provincia y del país en general; que a lo largo de su vida ha probado ser una persona honorable y de conducta ejemplar. Por eso me tomo la licencia de copiar el artículo que él escribe en diario Expreso (27.11.2024), bajo el titulo de esta columna y que textualmente dice:

“En medio de la penumbra política que vive el país me he recreado y disfrutado leyendo el libro que sobre la historia del Ecuador ha publicado últimamente el general José Gallardo Román, cuya trayectoria sin tacha como oficial de las Fuerzas Armadas, su encendido patriotismo, y su apego al axioma militar del honor, disciplina y lealtad, constituyen un ejemplo para quienes integran tan fundamental institución, así como para aquellos ciudadanos que creemos que el patriotismo no ha muerto y que un país con más justicia, más ética y mayor bienestar social es posible.

“Se afirma que la historia es la maestra de la vida, la memoria de una sociedad, que debe conocer su pasado para entender su realidad presente y proyectar su futuro; el libro de mi referencia es justamente muy prolijo en narrar hechos de una manera fidedigna, sin interpretaciones subjetivas y valorando aquellos acontecimientos que han contribuido a construir nuestro país.

“Siendo un libro histórico actualizado debe ser adoptado por el Ministerio de Educación como texto oficial de los estudiantes, como en su momento lo fue el libro de Educación Cívica de autoría del Dr. Alfonso Mora Bowen, inclaudicable luchador como fiscal General del Estado, por el imperio de la moral y la justicia en la sociedad ecuatoriana, texto con el que nos formamos los estudiantes de mi generación.

“El libro de historia de mi comentario recoge lo que fue la llamada Guerra del Cenepa, epopeya histórica que reivindicó el honor y la dignidad de los ecuatorianos, que habíamos sido víctimas de sucesivos despojos territoriales por nuestros vecinos; por eso el país se unió y recuerda con gratitud la valiente y firme defensa de la integridad territorial hecha en el campo de batalla por nuestras Fuerzas Armadas, al mando del Gral. Paco Moncayo, los coroneles Luis Hernández y Luis Aguas, que por primera vez triunfaron contra las fuerzas peruanas posibilitando la firma de la paz con el Perú.

“Al Gral. Gallardo se lo bautizó como el Ministro de la Paz y de la Guerra, al ser quien dirigía el Ministerio de Defensa durante el conflicto y en el proceso de paz”. Hasta aquí el texto.

Yo agrego, solamente, que el general Gallardo es un ciudadano piñasiense, radicado en Quito, que ocupó por dos ocasiones el ministerio de Defensa, presidió las más altas funciones en el Ejército Nacional; dirigió importantes entidades públicas, fue diputado por El Oro y candidato a la presidencia de la República.