El Palacio de Buckingham, uno de los símbolos más icónicos de la monarquía británica, cerrará sus puertas al público y a las visitas oficiales por un periodo de tres años, desde 2024 hasta 2027, debido a una serie de reformas que fueron ordenadas por el rey Carlos III.
Este anuncio ha generado controversia debido a la magnitud de la obra y el elevado costo que implicará la remodelación, considerada una de las más grandes de los últimos tiempos.
El último mandatario en visitar el palacio será el emir de Catar, quien se encontrará en el Reino Unido el próximo 4 de diciembre.
A partir de esa fecha, el castillo permanecerá cerrado para llevar a cabo las reparaciones y mejoras necesarias.
Durante este periodo, las cenas de gala y otros actos oficiales se trasladarán al castillo de Windsor, ubicado a 45 minutos de Londres, mientras que las audiencias reales se celebrarán en el Palacio de St. James, en el centro de la capital británica.
A pesar de la justificación de que el palacio necesita mejoras estructurales para seguir siendo seguro y funcional, la remodelación ha sido criticada por el alto coste en un contexto de incertidumbre económica.
La noticia ha acaparado la atención, especialmente tras el diagnóstico reciente de cáncer de Carlos III y la recuperación de la princesa de Gales, Kate Middleton.
0 comentarios