El empate 3-3 del Feyenoord ante el Manchester City en la Champions League, luego de ir perdiendo 3-0, desató una fuerte reacción en Pep Guardiola, quien apareció en la rueda de prensa con varios rasguños en la cara, incluyendo un corte en el tabique. El entrenador catalán confesó que los daños fueron causados accidentalmente con sus propias uñas y explicó que su reacción fue impulsada por su frustración.

Horas después, Guardiola publicó una disculpa en sus redes sociales, reconociendo que su comentario no minimizó la seriedad del problema de la autolesión. Aprovechó para hacer un llamado a la salud mental, invitando a quienes enfrentan dificultades emocionales a buscar ayuda.

Este incidente se suma a la crisis que atraviesa el Manchester City, que ha registrado cinco derrotas y un empate en sus últimos seis partidos. A pesar de renovar su contrato por dos años, Guardiola se mostró preocupado por la situación del equipo, que enfrenta a Liverpool en la próxima jornada de la Premier League.