Este jueves, el precio de Bitcoin rompió un nuevo récord, superando los 98.000 dólares por primera vez, impulsado por el creciente optimismo en torno a las promesas del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, de fomentar una regulación favorable para las criptomonedas.
Durante el comercio temprano en Asia, Bitcoin alcanzó los 98.150 dólares, con expertos proyectando que podría llegar a los 100.000 dólares pronto.
Stephen Innes, de SPI Asset Management, atribuyó este auge al creciente entusiasmo por la administración de Trump, que ha expresado su intención de convertir a Estados Unidos en “la capital mundial del bitcoin y las criptomonedas”.
Trump también se comprometió a reducir las regulaciones sobre el sector, lo que ha generado expectativas de una era favorable para las criptomonedas. Este optimismo ha desencadenado una especulación intensa, llevando el valor de Bitcoin a niveles sin precedentes.
Desde las elecciones presidenciales de principios de noviembre, el precio de Bitcoin ha aumentado casi un 40%. Esta subida coincide con las declaraciones de Trump durante su campaña, donde denunció lo que consideró la “persecución” regulatoria del gobierno de Joe Biden y prometió promover una legislación más amigable con las criptomonedas.
Aunque el repunte actual de Bitcoin sugiere un horizonte prometedor, la volatilidad inherente a las criptomonedas hace que el futuro de la moneda digital siga siendo incierto.
Los especuladores están centrados en si Bitcoin podrá superar la barrera simbólica de los 100.000 dólares, lo que marcaría un hito en la historia de la criptomoneda.
El entorno favorable para las criptomonedas
El mercado cripto también ha recibido noticias positivas, como las negociaciones entre Trump Media & Technology Group Corp. y Bakkt Holdings Inc., lo que ha impulsado el valor de las acciones de ambas compañías.
Además, Nasdaq Inc. planea listar opciones sobre el iShares Bitcoin Trust, y Goldman Sachs Group Inc. está tomando pasos para integrar las criptomonedas más profundamente en el sistema financiero, lo que refleja una creciente aceptación de las monedas digitales.
En este contexto, las expectativas son altas sobre el futuro de Bitcoin y las criptomonedas, especialmente con las promesas de Trump de un marco regulatorio favorable.
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