La intensa lluvia que afectó a varios sectores de Cuenca la tarde del martes 5 de noviembre de 2024 trajo esperanzas de alivio en la crisis de agua, con el objetivo de aumentar el nivel del embalse de Mazar y reducir los cortes de electricidad. Sin embargo, aunque las precipitaciones registraron una intensidad de 26 mm/h en el centro y este de la ciudad, según la Empresa de Telecomunicaciones, Agua Potable y Alcantarillado de Cuenca (ETAPA EP), el efecto en los cuerpos de agua de la región fue limitado.

El Parque Nacional Cajas, una de las fuentes de agua para Cuenca, solo recibió una leve llovizna, insuficiente para aumentar el flujo de los ríos y mucho menos el nivel del embalse de Mazar, el cual abastece en cascada a las hidroeléctricas Mazar, Paute-Molino y Sopladora, vitales para la generación eléctrica del país.

Según reportes de la Corporación Eléctrica del Ecuador Sur (CelecSur), el nivel del embalse de Mazar se registró en 2 115,03 metros sobre el nivel del mar el 6 de noviembre, apenas por encima de su umbral crítico de seguridad de 2 115 metros. En solo dos días, el nivel del embalse descendió 96 centímetros debido a las operaciones de generación eléctrica, lo que podría poner en riesgo el funcionamiento de las plantas si los sedimentos comprometen los equipos.

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Producción eléctrica en descenso

Para mantener la generación eléctrica, Mazar ha mantenido dos unidades en operación, produciendo hasta ahora 887,45 MWh. En la planta Paute-Molino, seis de sus 11 unidades generaron 5 060,79 MWh desde la madrugada del 6 de noviembre, mientras que Sopladora, operando con dos de sus cuatro unidades, generó 2 985,57 MWh. Estas cifras reflejan el alto consumo del embalse, en contraste con la limitada entrada de agua.

Pronóstico de lluvias desfavorable

El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi) pronosticó que las lluvias intensas no continuarán esta semana, sino que predominarán altas temperaturas y radiación ultravioleta en gran parte del país, especialmente en la región Amazónica y la Sierra. Solo se esperan lluvias aisladas en algunas zonas de la cordillera oriental en las tardes, lo cual no contribuirá significativamente a la recuperación de los embalses.