Desde el 28 de octubre de 2024, la hidroeléctrica Mazar ha estado operativa solo dos días, el 1 y 2 de noviembre, acumulando un total de 10 horas de funcionamiento. Este esfuerzo se ha enfocado en aprovechar los picos de producción de la planta Coca Codo Sinclair, impulsados por las lluvias en la Amazonía. Sin embargo, cuando esta opción no está disponible, se han utilizado otras plantas como Paute, Sopladora y Minas San Francisco para mantener el suministro eléctrico.

El feriado reciente ha contribuido a disminuir la demanda de electricidad, pero Mazar ha recuperado apenas 4,08 metros en su nivel de embalse en estos ocho días, lo que plantea la pregunta de si esta recuperación será suficiente para reducir los cortes de luz de 14 a solo 6 horas diarias.

La estrategia para recuperar el embalse de Mazar, crucial para el sistema eléctrico del país, ha sido mantener la planta inactiva tanto como sea posible. Desde el 28 de octubre, Mazar ha operado solo 10 horas en total: dos turbinas estuvieron encendidas durante la noche del 1 de noviembre, y una turbina funcionó entre la 1:00 y 7:00 del 2 de noviembre. Esto contrasta con las 192 horas totales de este periodo, evidenciando la ineficiencia en la recuperación del embalse.

Con un feriado en curso, el nivel del embalse de Mazar ha aumentado de 2.112 a 2.116,08 metros sobre el nivel del mar, aunque aún se encuentra 36,92 metros por debajo del nivel óptimo para su operación. Mientras las lluvias han favorecido a Coca Codo Sinclair, otras plantas han tenido que ser utilizadas. Por ejemplo, Paute operó 48 horas y Minas San Francisco, que ha sido la más activa, funcionó durante 157 horas en la misma semana.

El embalse Amaluza, que alimenta Paute, ha subido de 1.979,35 metros a 1.982,08 metros, pero sigue por debajo del nivel óptimo de operación. En general, todas las principales hidroeléctricas en el sur del país están lejos de alcanzar su capacidad máxima, a pesar de la menor demanda de electricidad.

Alejandro Jaya Montalvo, ingeniero en energías renovables, indicó que la reducción en el consumo de electricidad a 58,5 Gigavatios/hora durante el feriado ha ayudado, pero con la reducción de cortes de luz anunciada por el gobierno, es probable que se requiera mayor uso de Mazar. “El tiempo que Mazar puede mantenerse operativa dependerá de las lluvias y la demanda en la costa”, explicó Montalvo.

El presidente Daniel Noboa había anunciado una reducción gradual en los cortes de luz, pero la implementación de estos cambios ha sido irregular. Tras una semana de cortes de 14 horas, el gobierno se enfrenta nuevamente a la presión de equilibrar la empatía hacia la población con la realidad técnica del sistema eléctrico. La incertidumbre persiste sobre si los nuevos anuncios se basan en criterios técnicos sólidos o en un enfoque empático hacia los ciudadanos.