La fiscal boliviana Sandra Gutiérrez anunció la emisión de una orden de aprehensión contra el expresidente Evo Morales, quien es investigado en un caso de trata de personas y estupro. Según la fiscal, Morales fue notificado sin vulneración de sus derechos, pero no se presentó a declarar en la Fiscalía de Tarija, argumentando que el proceso debería llevarse a cabo en Cochabamba, donde reside.

El caso involucra una denuncia que acusa a Morales de haber tenido una relación con una menor, con quien supuestamente tuvo un hijo. La menor pertenecía a un grupo juvenil creado durante su presidencia, conocido como ‘Generación Evo’. Ante la incomparecencia de Morales y otros dos implicados, Gutiérrez aseguró que se emitirá la orden para que declaren, y afirmó que el proceso se está desarrollando de manera transparente y legal.

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Morales, quien no asistió a la citación, calificó el caso como “mentira” y “cerrado”, asegurando que enfrentará lo que considera una “persecución política”. Además, advirtió sobre la posibilidad de movilizaciones sociales en respuesta a su aprehensión. Organizaciones afines a Morales han amenazado con bloqueos de carreteras si la Fiscalía avanza con la orden.

Por su parte, el Grupo de Puebla manifestó su preocupación por lo que considera una “campaña de lawfare” o uso político del sistema judicial contra el exmandatario.