La Agencia de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (ARCSA) llevó a cabo una inspección en 27 establecimientos de Quito, incluyendo farmacias y tiendas, donde se encontraron más de 200 medicamentos sin registro y caducados.

Los técnicos de ARCSA verificaron la calidad de los productos y hallaron que estos medicamentos se vendían, poniendo en riesgo la vida de los pacientes.

Los locales sancionados han recibido notificaciones formales por parte de la ARCSA, lo que podría acarrear severas consecuencias para la salud pública.

Clausura de restaurante en Mejía

En una acción adicional, un restaurante en el cantón Mejía fue clausurado tras la visita de los técnicos de ARCSA.

Durante la inspección, se detectaron plagas, acumulación de basura y condiciones de total insalubridad en la cocina.

Se comprobó que la comida se preparaba en este establecimiento sin las mínimas normas de higiene requeridas, lo que representa un grave riesgo para la salud de los consumidores.